La muerte de Roberto Gómez Bolaños, el ídolo de la comedia y creador de historias afectó a miles de seguidores en el mundo, fue un funeral multitudinario que quedó en la historia de México. Pero no cabe duda que quién más lloró su muerte fue su esposa, Florinda Meza, conocida por su papel de “Doña Florinda” en El Chavo del ocho.
A cinco años de este suceso, la actriz compartió los duros momentos que pasó tras la pérdida del hombre con el que duró casada 40 años: “Solo quería dormir y no despertar”.
Meza recordó que se sintió perdida por un momento, sin rumbo, no tenía claro qué sería de ella, ya que su última participación en pantalla fue en 1991 cuando salió en la película Milagro y magia: “Después de la muerte de Roberto entendí que debía continuar con mi vida”, relató.
Es por esto que, tras casi 28 años sin aparecer a cuadro, fue contactada por el realizador chileno Nicolás López, quien la invitó a trabajar en su nueva cinta “Dulce Familia” donde interpreta al personaje de “Verónica Trujillos”, una diva de las telenovelas que se niega a envejecer y busca que su imagen perdure como una leyenda de la televisión.
Y es que este proyecto es tan importante para la actriz que a pesar de que nunca le ha dedicado a nadie su trabajo, ni siquiera al que fuera su pareja, declaró: “Siempre cuando trabajo no le dedico en especial a alguien de mi familia, aunque sé que a Roberto le gustaría verme y estaría feliz de interpretar la comedia, le dedico mi trabajo al público”.
Florinda Meza también relató que el primer día de grabación sintió miedo, ya que había pasado mucho tiempo de su último trabajo y tenía compañeros con mucho talento, entre ellos Fernanda Castillo, Vadhir Derbez y Regina Blandón. Agregó que ella estaba acostumbrada a trabajar con los guiones de Roberto Gómez Bolaños, era él quien la dirigía y acompañaba, por lo que trabajar en este proyecto fue algo totalmente distinto, pero terminó por congeniar con sus compañeros.
Respecto a la televisión, declaró que confía en los nuevos tiempos y que las plataformas de streaming son parte de un proceso evolutivo, como pasó en su momento con la televisión y el cine. “Que yo no vea las porquerías que hacen en la televisión mexicana, no significa que, si hacen algo bueno, no lo vea”, explicó.
Actualmente la actriz todavía reside en su casa de la colonia Del Valle en la Ciudad de México, donde vivió con Gómez Bolaños y la cual piensa conservar mientras siga viva.
Faranduland 